No es un instinto, sino algo que se aprende, y contrario a lo que muchos piensan, no es exclusivamente femenino, sino que hombres y mujeres pueden serlo. Hoy nos ocupa desvelar qué es la sensualidad, y las múltiples maneras en que esta se manifiesta.
En nuestro artículo, también te daremos tips para fomentar esa suerte de “no-se-qué” que atrae y nos atrae. Así que, si alguna vez te has preguntado cómo ser sensual, esta es tu oportunidad para descubrir todo sobre el tema.
Qué es la sensualidad: significado y ejemplos
La sensualidad es una cualidad que provoca la atracción en otras personas o en uno mismo. Esta atracción puede tener claros matices sexuales, de excitación, de relajación, etc.
Algunos ejemplos de qué es sensualidad podrían ser ese chico con aspecto viril y galante, que siempre te sorprende con una vivencia interesante o con una observación que te hace reír. O la chica que no se viste para impresionar, sino para gustarse a sí misma, y que con ese sencillo encanto que brinda la autoconfianza, atrae a muchas personas a sus proyectos y vida social.
Eso sí, no imagines que se trata de un club al que unos pocos tienen acceso: no hay nada en una persona sensual que cualquiera de nosotros no tengamos a nuestro alcance. Es decir, la confianza en sí mismos y el sentirse bien con su forma de ser, son aspectos clave en toda personalidad sensual.
Aunque no lo creas, la sensualidad no tiene nada que ver con tu físico, aunque claro, hay ciertos aspectos en ese sentido que pueden ayudarte a proyectarte (pero más importante a sentirte) un ser sensual. Sobre ello hablaremos luego, pero el lugar por donde todo empieza es dentro de ti:
Quiérete cómo eres, siéntete segura contigo misma, fomenta tu sentido del humor, tu cultura general y tu ingenio, estos aspectos son universalmente sensuales.
Diferencia entre sensualidad y sexualidad
Muchos asocian la sensualidad con el deseo sexual, y confunden, por tanto, sexualidad y sensualidad. Sin embargo, la sensualidad es más una expresión de la feminidad o masculinidad que no necesariamente conduce a las relaciones sexuales.
Mientras que la sexualidad se relaciona con el deseo y la satisfacción del impulso erótico, en la búsqueda del placer.
Tipos de sensualidad
Aunque consideramos que la sensualidad es un concepto abstracto algo complicado de definir, muchos coinciden en que se trata de una especie de magnetismo personal que se desprende de las personas en determinados momentos, o en algunos casos es un encanto permanente.
Como la sensualidad engloba tanto aspectos internos como externos, podemos decir que existen dos tipos de sensualidad: sensualidad interior y sensualidad exterior.
- Sensualidad exterior: Está estrechamente relacionada con los sentidos: hay voces que nos parecen más atractivas que otras, olores que nos reclaman, texturas y todo el mundo sensorial al alcance de nuestras manos, etc. En cuanto a la vista, percibir una piel hidratada y saludable, una imagen prolija, la sonrisa fácil y el maquillaje se asocian comúnmente con este tipo de sensualidad.
- Sensualidad interior: Esta tiene mucho que ver con los pensamientos, los sentimientos y la personalidad. Aquellas personas con una mayor sensualidad interior, tienen lo que llamamos una personalidad magnética, una cualidad inexplicable que hace que el aspecto físico quede relegado a segundo plano, o que se transforme a ojos de la persona cautivada.
5 tips para tener una personalidad sensual
Muchas personas rechazan la idea de ser sensuales, porque piensan que necesitan cambiar su forma de ser para ello. Pero ese no es para nada el caso: cada persona tiene su encanto, y solo con potenciarlo ya está siendo sensual.
Sin embargo, reconocemos que no es tarea fácil sentirse sensual cuando el exterior está en disonancia. Así que hablemos un poco en materia de consejos para cada sexo, que les ayuden a alcanzar su máximo potencial sensual:
Para ellas
La sensualidad se asocia mucho con lo femenino por ese carácter sutil y delicado, de ambas. Así que, manteniendo esa idea en mente:
- Mantén tu cuerpo humectado: Una piel suave y en buen estado es sinónimo de juventud y vitalidad. Todos los días después de bañarte o antes de irte a la cama, date un masaje con una crema cuya fragancia te haga sentir sensual.
- Usa labial o brillo de labios: No tienes que maquillarte por completo si no quieres, pero solo con resaltar tus labios (uno de los rasgos más asociados con la sensualidad femenina) ya sentirás un cambio increíble. Dotar a tus labios de color o volumen mediante estos productos te hará verte –y sentirte- muy sensual. Si no te sientes segura con los colores fuertes como el rojo o el marrón, opta por un brillo transparente que haga ver tus labios húmedos y carnosos.
- Corrige tu postura: Quizás para trabajar o leer te sientes más cómoda encorvando la espalda, pero lo más probable es que si tienes esta postura al hacer esas actividades, también camines de la misma forma. Eso es un gran ¡NO-NO! Caminar erguida, con los hombros hacia atrás y la cabeza en alto te hará más elegante y seductora.
- Sonríe, siempre sonríe: No te estamos incitando a que mantengas los dientes afuera en todo momento, pero no caben dudas de que las sonrisas llaman mucho la atención, ¡y atraen! Claro, de nada sirve sonreír, si tienes mal aliento, los dientes sucios o los labios agrietados, así que cuida esos aspectos siempre.
Para ellos
Un hombre seguro de sí mismo –sin llegar a ser narcisista- ya es bastante sensual, pero, ¿cómo demostrarlo? En estos tips radican los puntos clave para ser sensual:
- Trabaja en tu sentido del humor: Con esto no decimos que debas convertirte en el payaso de la fiesta, pero sin dudas las personas encuentran más atractivos a los hombres con sentido del humor. Saber reírte de ti mismo, de las cosas sin importancia y siempre con actitud positiva, es clave para ser sensual.
- Ten una personalidad definida: Mostrar tus ideas y criterios, formados a partir de tus valores, principios y experiencias es como un imán que atrae a otros. Esto también implica estar cómodo contigo mismo y con la persona en que te has convertido. No pretendas ser quien no eres para agradar, porque tarde o temprano tu verdadero yo aflorará, y lo ideal es que ese YO valga la pena: por ende, constrúyelo y cultívalo continuamente.
- Eleva tu nivel cultural: El que puedas abordar cualquier tema de conversación de forma natural demuestra una excelente cultura general, y resulta inmensamente atractivo. La educación y la cultura no son bienes sobrevalorados, así que es mejor no prescindir de ellos.
- Cuida tu apariencia física: Un hombre aseado y con la piel cuidada es sexy, más allá de su altura, peso o tez. Evita andar desaliñado, lleno de pelos y con la ropa estrujada. Usa loción o crema hidratante para la cara, y no olvides mantener tus uñas bien cortadas y limpias.
¿Aplicas ya estos consejos a la hora de ejercitar esa forma tan misteriosa de atracción que es la sensualidad? Cuéntanos cómo ha sido tu experiencia.
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