Como cientos de cosas en esta vida, el porno puede ofrecernos placer pero también convertirse en un cruz con la que debemos cargar. Esta es una de las formas más sencillas y accesibles con la que cuentan millones de personas a la hora de buscar placer. Sin embargo, existe un punto donde lo placentero se puede convertir en algo dañino. Aquí te contamos algunas señales que te pueden indicar que estás llevando muy lejos tu gusto por la pornografía.
Pasas demasiado tiempo viendo porno
Los adictos al porno pasan demasiado tiempo viendo porno, solos con sus fantasías. Suelen tener horarios anormales y descuidan a la familia, amigos y otras responsabilidades para nutrir su adicción. Pero, ¿cuánto es demasiado? Es demasiado cuando decides dejarlo, pero ya no puedes controlarlo.
Te aislas del contacto directo con otras personas
Los adictos al porno pasan más tiempo con pornografía que interactuando con el mundo real, un hábito que puede dañar su capacidad de establecer relaciones de largo plazo.
Le mientes a tu pareja
Al sentirse avergonzados de sí mismos, los adictos enturbian sus relaciones con secretos y engaños. Quieren esconder su adicción al porno ante su pareja. Y hacen hasta lo imposible para no ser descubiertos.
Tu pareja ya no te parece atractiva
Con cuerpos perfectamente moldeados y afeitados o depilados, las estrellas porno son un verdadero riesgo de caer en una fantasía sexual permanente. Y puede hacer muy difícil que te excite un ser humano de carne y hueso. Competir con perfección, puede hacer que veas menos atractiva a tu pareja en comparación.
Está afectando tu vida sexual
Podría surgir un distanciamiento emocional con tu pareja por la adicción al porno. Que te podría llevar a una vida sexual insatisfactoria. Aún durante el sexo, la mente de los adictos al porno podría estar atascada en su mundo de fantasía, el cual, ninguna experiencia real puede igualar.
No es raro que el hombre y la mujer adictos al porno sientan menos deseo sexual por sus parejas. Pues están acostumbrados a excitarse solo con pornografía. Es ese caso, los/as adictos/as suelen culpar a sus parejas de su incapacidad de hacerlo, y así, la relación es afectada aún más.
Tu concepto de intimidad se ha distorsionado
Las expectativas sexuales y de intimidad de un/a adicto/a se pueden volver irreales. Si solo te interesa la gente que se ve y actúa como estrella porno, y crees que hay algo malo con las parejas que no lo parecen, tal vez sea hora de buscar ayuda.
Tu obsesión al porno te está causando angustia
Tu hábito de ver porno te puede causar angustia psicológica y emocional. Tal vez porque tu adicción al porno no empata con tu sistema de valores. Y te puede hacer sentir aislamiento, vergüenza o irritabilidad.
Tu comportamiento sexual se está volviendo cada vez más peligroso
Tal vez quisieras vivir las fantasías del porno en tu vida real. Si tienes sexo sin protección con extraños, puedes arriesgar tu salud y bienestar. Usar pornografía infantil o cualquiera otra ilegal, te puede poner en gran riesgo. Si te encuentras en esta situación, es mejor que busques ayuda de inmediato.
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